Un pequeño cuento sobre 2 almitas
Ellas eran almas que por eones de vidas habían compartido historias juntas. Desde su luz, ambas se iluminaban y compartían su eternidad juntas, hasta que un día la almita de la verdad en su curiosidad de conocer las verdades ocultas que en el mundo de abajo se guardaba decidió emprenderse en un viaje a recolectar todos los secretos del universo y con su luz llevar la verdad a esos espacios de confusión.
Así que la almita de la verdad con esa decisión que chispeaba en ella fue a su amiga alma de la vulnerabilidad y le compartió su decisión, el alma de la vulnerabilidad le escucho y le dijo: ‘te voy a acompañar en tu viaje’ ‘en tu camino vas a necesitar a alguien que te pueda ayudar a recordar que tu misma eres la verdad en manifestación, así no te perderás en las verdades que vayas descubriendo y recordaras tu esencia.’
Es así como ambas reencarnaron en cuerpos físicos, pero en el viaje de descensión nacieron separadas.
Por siglos, ellas vivieron vidas separadas, hasta que en una de esas vidas al fin se re-encontraron.
Cuando el alma de la vulnerabilidad volvió a encontrar a la de la verdad, su amiga aún guardaba su ansia de llevar verdad a todos los seres que vivían cegados, pero esta vivía con una voz de amargura, tantas vidas de batalla por la verdad habían ido amargando su propia esencia y apagando su luz.
Su re-encuentro les abrió al recordar de cuando decidieron emprender el viaje juntas. Es asi como el alma de la vulnerabilidad con la pequeña luz que aun guardaba, pidió fortaleza prestada del infinito para poder iluminar la verdadera esencia de su hermana.
Es así como en el año 2020, si miras hacia la tierra podrás ver 2 pequeñas luces que caminan juntas, viviendo para recordar sus luces verdaderas y así volver a ascender cuando su propósito haya sido realizado.
